Para quien no lo recuerde, el
iPod original llegó el
23 de octubre de 2001 con la presentación oficial a cargo de
Steve Jobs. Y este dispositivo no fue sino una respuesta a la
revolución musical que supuso en aquellos tiempos
Napster, ahora a la sombra de Spotify y sus similares, y para
resolver la carencia de los Mac para la reproducción de música en formato MP3. El primero de ellos contaba con un
disco duro y fue el origen de
las dependencias con iTunes.
La historia de Apple, la música y los iPod se repite con el iPhone 7
Aquella
revolución de la música dejó a Apple en
fuera de juego durante un año, pero a finales de 2001
el iPod ‘lo cambió todo’ y fue otro de los bombazos de la firma de Cupertino. Pero, ¿por qué fue tal el éxito del iPod? Vamos con ello.
Las razones del éxito del iPod en 2001
Durante la presentación del iPod original,
hace casi 15 años, Steve Jobs arrancaba su discurso recordando que
‘la música forma parte de la vida de todos’,
luego es evidente que el mercado para este tipo de dispositivos es
realmente amplio. Y otra cuestión interesante que señalaba en aquella
presentación es que
no había un líder definido en el mercado de la música digital. ¿Qué venía el iPod a proponer en ese contexto? Según las propias palabras de Steve Jobs,
‘un reproductor MP3 con la calidad de audio de un CD’.
Porque, como él mismo explicaba durante esta presentación, en aquel
momento había diferentes tipos de dispositivos para la reproducción de
música en formato portátil, y lo cierto es que nadie había combinado aún
lo mejor del CD en términos de calidad de audio con
lo mejor del MP3, que por aquel entonces era la relación
precio/canción teniendo
en cuenta la capacidad de almacenamiento. Por lo tanto, lo que allí se
expuso es que, básicamente, el iPod rompía con todo lo anterior
ofreciendo
alta capacidad de almacenamiento interno con su disco duro para albergar 1.000 canciones y, al mismo tiempo, una
alta calidad de audio.
Pero evidentemente esos no fueron los únicos puntos clave, sino también
abrirse al concepto multiplataforma dando soporte a usuarios con ordenadores Windows. Algo que se ofreció gracias a
iTunes. Y por otro lado, el
apoyo de discográficas para un proyecto que, aunque cerrado a los formatos ajenos a iTunes, permitía la
compra individual de canciones de prácticamente todos los artistas de cualquier género.
El iPhone 7 es el ‘nuevo iPod’ de Apple, por varios motivos
Genial, pero
¿qué tiene que ver el iPod original con el nuevo iPhone 7?
Resulta que a Apple le fascina recorrer su historia y rehacerse sobre
sus propios pasos, y en el evento de presentación del iPhone 7,
prácticamente,
el iPod cumplirá 15 años de vida. Esta fecha tan señalada coincide con algunos pasos recientes que Apple ha dado en el campo de la música. Nada menos que
comprando Beats. Y la compra de Beats engloba varios puntos, pero algunos de los más importantes son la
relación con discográficas y artistas, la fabricación de
hardware dedicado al sonido y, ¡sorpresa! una
plataforma dedicada a la música portátil, que ya se está utilizando bajo
Apple Music. Por lo tanto, tenemos las piezas necesarias para un puzzle que permitiría
repetir a pies juntillas la revolución del iPod,
pero evidentemente introduciendo nuevos elementos correspondientes a
los tiempos que corren, porque relanzar lo mismo que hace 15 años no
sería en absoluto una innovación.
Apple volverá a la innovación con la ‘nueva revolución de la música digital’
Ahora mismo está
Spotify a la cabeza de la música en streaming, pero hay otros partícipes de este mercado y son, entre otros, desde
Google Play Music hasta
TIDAL, y evidentemente pasando por la propia firma de Cupertino con
Apple Music. Como Steve Jobs explicaba hace 15 años,
‘la música forma parte de la vida de todos’,
algo que no ha cambiado, aunque sí el formato de reproducción y, sobre
todo, de adquisición. La música digital ha evolucionado, la música
portátil también, pero,
¿hay un líder definido en este mercado? Sí, y no. Spotify tiene la mayor base de usuarios y, sin embargo, TIDAL tiene la mejor calidad en este segmento con el
formato Hi-Res. Una apuesta por un
mayor bitrate que, sin embargo, para la mayoría de los usuarios se ve castigada porque
el hardware no acompaña. Ya sea el propio dispositivo, o ya sean los auriculares y altavoces.
Aquí
es donde está la clave del asunto, y según los pasos que está dando
Apple, y las filtraciones que hay hasta el momento, se plantea
una nueva revolución en la música protagonizada por Apple con su iPhone 7. El cambio del sonido digital al analógico, como nos explican en MovilZona con todo lujo de detalles, y a continuación voy a desarrollar yo también.
La muerte del minijack de 3,5 mm es fundamental para Apple y el iPhone 7
En términos de diseño,
abandonar el minijack de 3,5 mm es crucial para poder fabricar
un iPhone 7 más delgado. Y aquí hay un obstáculo, que son las
pantallas IPS LCD
que cuentan con una capa de retroiluminación que fuerza a la
construcción de un dispositivo más grueso. ¿La solución? Montar en este
dispositivo un
panel OLED de grosor más reducido que
concuerde con las posibilidades que permite dejar el minijack de 3,5
milímetros para los anales de la historia del diseño en Apple.
De acuerdo, entonces, con que según las filtraciones estos dos cambios permitirán a la firma de Cupertino
un iPhone más delgado, y evidentemente también juega un papel protagonista
un proceso de fabricación alternativo para el microprocesador, que probablemente pasará a los 10 nanómetros, o similar. Con todo esto ya tenemos una importante mejora en
rendimiento y diseño, y queda más
‘hueco libre’ en el interior del iPhone 7 para introducir una
batería de mayor capacidad, que si mejora en su densidad también garantizará
más autonomía. Por lo tanto, todos estos elementos ya están adelantando algunas de las claves en la
innovación del iPhone 7, pero si miramos a sus competidores no es más que una
evolución lógica, pero no algo revolucionario.
La verdadera revolución del iPhone 7
Otro punto que va a permitir el
abandono del minijack de 3,5 milímetros es, como comentaban en MovilZona, pasar
del sonido analógico al digital, es decir, abandonar definitivamente las
dependencias analógicas y lo que eso supone en la
conversión de la señal de audio. Y en este proceso de
conversión el dispositivo clave es el
DAC
-Digital to Analog Converter-, que en todos los teléfonos inteligentes
actuales se encarga de transformar la señal digital en analógica. Sí,
este componente también ocupa algo de espacio en el interior del
dispositivo, pero el factor clave es que es
determinante para la calidad del audio.
Por lo tanto, ¿qué quiere decir esto? Que aunque a un iPhone 6s, o cualquier teléfono inteligente, le conectes
auriculares de 10 ó 1.000 euros, siempre vas a tener ciertas limitaciones por las prestaciones del DAC del dispositivo. Lo mismo con los altavoces, puesto que
la señal sale ya convertida desde el minijack 3.5 milímetros. ¿Qué pasa si nos
‘cargamos’ el DAC? Que sale del dispositivo, a través del
conector Lightning una
señal digital ‘pura’,
y la conversión la hacemos fuera de él, con el DAC que incluyan
nuestros altavoces o auriculares. Y sí, en este punto puede hacer
cambios drásticos en la calidad de sonido en función del DAC que incorpore nuestro sistema de sonido.
Pero en este contexto, por lo tanto, tenemos una
importante revolución en la que se crean otras
‘dependencias’. ¿Cómo exprimo la calidad de sonido de mi iPhone 7 recién estrenado? Sí, con los
equipos Beats que estarían adaptados a esto desde su lanzamiento, y además con
Apple Music que contaría también con
formatos Hi-Res para prestarte un nivel de calidad de audio superior a sus rivales, o por lo menos
a la altura de TIDAL. Es decir, simplemente abandonando el minijack de 3,5 milímetros, de repente Apple puede crear
un nuevo ‘entorno’ dentro del mercado de la música digital. Con su propia plataforma de software –
Apple Music-, su hardware de reproducción –
equipos Beats- y una
brecha temporal en la que aún no habrá respondido su competencia.
Este
Articulo se escribio primero en adslzone.net, por
Carlos González
#Elmero.